viernes, febrero 17, 2006

Futbol de jueves # Tres

Ayer victoria al fin. Bien. Pero como siempre, emulando al Frankestein de Mary Shelley.
Teníamos desventaja numérica (uno menos) y eso, según Martín A, a veces te juega en contra y otras te juega a favor. Dice que a nosotros nos jugó a favor ese hecho; "la heroica" la llamó. El Revolucionario se puso el 2 en la espalda y Martín O se armó todo; Martín O el Armador, no queda mal. Para mí, la clave fue anular al cerebro del otro equipo: El Jefe. No se fue con las manos vacías, me clavó dos cruzados que me dejaron con el culo mirando el norte.
¡Como me revienta el verano en las canchas de césped sintético! ¡Qué calor, hermano! Entre la arena que se te mete por la raya del culo (en mi caso por revolcarme) y el encierro de esa cancha en particular; es tedioso el Open Garzo. La botella de agua nos salvó a un par. Igual, no safé: me raspé la pantorrilla, los bordes de la mano, los dos codos y me golpeé la cadera. Valentín me cruzó una y como me dejó sin reacción, la pelota pasó... pero se cruzó con mi mano izquierda y me dobló otra vez la muñeca. Me tienen de hijo las pelotas cruzadas, y El Jefe lo sabe, por eso me pasé la noche gritando "no lo dejen patear". Tengo que reconocer que cada vez que Superloyds apuntaba se me fruncía un poquito porque cuando la atajo (si la atajo) me hacen chispas las manos al choque con el balón. Ayer tuve suerte.
Lo que corrieron todos en esa cancha, no tiene nombre. Y fue tan chotante que decidimos cortarla porque no dábamos más. Me agoté en un par de quites porque no corría aire, había que encontrar oxígeno dónde sea: como los peces. Desde el arco podía ver como todos regulaban y marcaban jugadas seguras. Ninguno quería correr demás o desperdiciar energía. Y eso estuvo bueno, porque se hizo un partido "a dos toques" con algunas corridas de algún que otro sacado que veía un hueco pero que terminaba la jugada... nada de andar poniendo pases largos ni recorrer largas distancias con la pelota. Aunque se pierda en el alambrado, la jugada la terminaba el kamikaze.


Faltó uno. Alto garrón. Pero como dijo Casas: jugamos para pasarla bien. Y así fue.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Encantado, Funes. Buen equipo, amigo!

Atte.

Unknown dijo...

A ver si arregla su tobillo y se viene más seguido, maestro.

Buscccadores dijo...

Funes aquí hay un arquero que en cuanto se libere de las reponsabilidades que le complican los tiempos, estará disponible para cuando necesiten.
Como me gustan estos textos cuando hablan de fútbol!!!!
Salud!

Unknown dijo...

Avise con tiempo nomás que la lista es larga... como... como...

Buscccadores dijo...

AH! una cosa más, podría pasar un día entero hablando de fútbol y sin aburrirme para nada!!!!
Salud

Lunita dijo...

¿¿"Ninguno quería correr demás" o "Ninguno quería correr de más"??

Pregunto en serio...

Unknown dijo...

¡No lo puedo creer!


¡¡¡¡¡¡¡¡Se leyó casi entero el post que habla de fútbol, Luna!!!!!!!!!


¡¡Increíble!!

Loyds dijo...

lo nuestro fue un papelón realmente, hasta merecíamos una crítica menos contemplativa
salu2