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viernes, noviembre 27, 2009

Eramos tan pocos

pero con tanto para decir




Me acuerdo que me sorprendió ver las distintas etapas en la No Retornable. Me acuerdo que cuando sacaron unos números en papel me dio la sensación de que hubo un intento de llegar a hacer algo más tangible. Más allá que la propuesta era interesante porque era un solo papel desplegable muy divertido, esto no siguió, no sé si porque no les salió o no les alcanzaba la guita, lo cierto es que quedaba muy corto en papel respecto de lo que era en formato virtual. El número siguiente lo hacen un choclazo, como si se hubieran decidido explotar más las ventajas de una publicación online, que se puede extender. Desde afuera, noto que ese intento frustrado de llegar al papel dividió la publicación virtual en dos momentos: uno muy medido, y otro más desbordado, más consciente de las posibilidades distintivas del formato. Me pareció buenísimo eso de darle el espacio que quieran, que le sirve mucho más al que escribe pero también al que lee. Al tener libertad, se ven los propios límites del autor. No es lo mismo quien desarrolla un tema en dos carillas y quien lo hace en quince, el grado de profundidad y reflexión es distinto.


salió un nuevo número de la No Retornable



*

viernes, abril 17, 2009

Expo flogger - 2009

sobre la muestra fotográfica
Temperatura perfecta
de Carlos Herrera


Apenas entrás al pasillo del Purgatorio te dejás llevar por los marcos perfectamente alineados y hermosos. Como la estadística lo indica, arrancás por la izquierda, caminás lento, derecho, curioso, girás la cabeza levemente y mirás una a una las 40 fotografías hasta que lo ves: pálido, venoso, apagado pero imponente, genio dormido. El montonazo de carne, el chorizo blanco adormilado, la poronga, el choto, la pija, el trozo, matafuego, señor de abajo, pindonga, pocho, bebé, trompa de elefante, manguera, serrucho, palo, longaniza, tercera pierna o como sea que le llames al miembro flácido masculino se te presenta sin previo aviso y con un desparpajo que enturbia la vista y te hace dudar de dónde estás parado...

Después seguís mirando y caminás... como mucho.
Un poco perturbado por el tamaño de la foto, que al principio parecía pequeña pero no lo es, terminás el recorrido. Debe durar un minuto y medio o por ahí. No mucho más. Y pensás, "mi primo el flogger puede exponer tranquilamente, entonces".

Lo que se ve en la muestra no son más que las fotos de un chico con página en Flog (nótese que no menciono a Flickr ya que Flickr aloja usuarios más pretenciosos, cool o snobs). El Flog tiene la característica de ser muchísimo más sincero y atribulado que el Flickr que es algo más pensado e impostado.
Cuando decimos que la web 2.0 se morfó el sueldo de bastante gente, podemos empezar a dar este tipo de obras como ejemplo. Pero ¿quién es Carlos Herrera?

Carlos Herrera es artista. En el proyecto Bola de Nieve pueden ver su perfil en el que vemos y leemos parte de su manifiesto artístico (dicho sea de paso, aguante el ciclo Manifiesto). Gugleando un poco más se pueden encontrar con Fernando Farina y su texto Elogio del gesto idiota y ahí vas entendiendo un poco más. También vas a ver que en esa página están colgadas 105 fotos de donde sacaron lo que sería Temperatura Perfecta, para el Purgatorio.

Desde siempre, desde que "Funes" existe, por lo menos, me interesó transformar lo virtual en real. Los ceros y unos en carne y hueso.
No sé por qué. Pintó el arrebato, digamos.
Por miles de formas lo he logrado y por otras miles de formas no. Trasladar la energía que alguien pone al tipear y llevarla a un espacio público o semi público para ver qué pasaba. Desde lecturas hasta partidos de fútbol, he probado todas las maneras posibles que me ofreció mi cabecita.

En el caso de Herrera tengo que reconocer que no puedo ver cómo logró que 40 de las 105 fotos que sacó lleguen a estar en una fotogalería. Al principio pensé, "los curadores no tienen internet, no conocen a los floggers therefore les parece interesante lo de Herrera". Pero me parece que tienen internet. Creo que sería absurdo pensar eso hoy día.
Entonces vuelvo a pensar, "es que vieron el perfil de Bola de Nieve y su trabajo Confort y Protección les pareció de un autor a tener en cuenta" y me cerró un poco más.
Cuando Herrera dice
Simplemente un gesto idiota que se repite siempre en mi obra. No hay mucho más que eso. Me interesa pensar que mi obra es inútil y que no modificará nada. No me interesan las teorías parafernáricas detrás de mis obras.
me hace acordar a los adolescentes de los '90 que militaban pero no querían que esa actividad sea manchada con el mote de "militancia" porque decían que no, que lo que ellos hacían era lo que les gustaba hacer y nada más.
Hacer arte y creer que no sirve para nada ya está viejo pero no por eso, evidentemente, es menos válido como argumento para entrar a exponer en una fotogalería de "vanguardia" como la que se administra en el Purgatorio.

En Confort y Protección Herrera logra más rápido lo que en Temperatura Perfecta cuesta ver. De todas formas surge otra idea: ¿cómo hacer para que los artistas copen más lugares reales teniendo tantos soportes virtuales que los reciben a cambio de dos o tres dólares del servicio AdSense y ningún tipo de filtro estético? Sin dudas que, presionados por la moda de los flogs y blogs, los que ejercían el filtro estético se vieron en la encrucijada de tener que decidir entre abrir el abanico de poéticas a distintas expresiones que ya están dando vueltas hace tiempo en muchísimos "lugares" o quedarse atrapados en "escandalosas discusiones" que ya no escandalizan a nadie.
También me resultó curioso que en la página del autor se puedan ver 65 fotos más de las que exponen en el Purgatorio. ¿Para qué ir a la fotogalería si desde la comodidad de mi hogar 2.0 puedo ver y entender a Herrera con el sólo ejercicio de mi dedo índice?

¿Para qué te preguntas, pequeño saltamontes?
Para ver esa foto que no está entre las 105 de la página. Porque gracias a esa sola foto la muestra toma real dimensión. Porque a partir de esa hermosa y lánguida poronga uno recibe el estímulo necesario para activar el cerebro (me siento como quien cuenta el final de una película no muy conocida. Quédense tranquilos que distinto es verlo a que te lo cuenten - en todo sentido).
¿Por qué activar mi cuerpo si con lo que muestra el artista ya me alcanza para el cerebro?
No sé por qué. Más de uno dirá que no es necesario tanto esfuerzo, que hay fotos mejores, que hay otros espacios menos agresivos para el visitante, que en otros lados te dan vino y sanguchitos de miga a cambio de pasar un rato... puede ser.
Lo que quieras.
Además del gesto de poner esa imagen, escaparle a internet y las relaciones virtuales para encontrarse con algo como, parafraseando a Herrera, "tan inútil como el marco de un cuadro" sigue siendo más provocador/estimulante que 400 giga de información en una página web que incluya videos, jueguitos virtuales o música de fondo.

Vengan al Purgatorio. Abandonen la silla. Usen las piernas y recuerden cómo era "hacer un comentario" a una persona que te está escuchando. Usen la cara, las cuerdas vocales.
Pero quién mejor que Divididos para convencerlos:

Setenta biblioratos
y nada más
sin un maní para mascar
cuatro minifaldas
y un patín
olvidados en un rincón.

Salgan al sol
revienten
salgan al sol
salgan al sol idiotas.

Cuatro solteronas
desinfladas
que se creen un primor
mesa redonda
y un doctor
que les habla habla del amor.

Salgan al sol
revienten
salgan al sol
salgan al sol paquetes.

Salgan al sol idiotas.

*

miércoles, abril 15, 2009

Matemáticamente hablando

Auspicia este post
Los Mudos

A veces el 15 viene después del 2. En general, el 2 viene después del 1. Es obvio que cuando el 15 viene después del 2, la frikiamos. Desde Papá y Mamá (o la tía en el caso de que seas un huerfanito / huerfanita) hasta la Escuela, el barrio, y los medios de comunicación (¿vieron? Puse medios de comunicación en lugar de Estado. Je.) nos enseñan cierta progresión. Una cantidad de hechos previsibles que construyen uno a uno el encadenado de la "edificio" que uno llama... uno llama... ¿Cómo se llama eso que uno construye a lo largo de toda la vida? No hablo de nada material, eh. Bueno, algún filósofo me ayudará.

Entonces, si pongo el agua en el fuego, para los mates, al rato hierve. Eso es imposible de evitar. ¿Es imposible? Bueno, ponele que sí; estamos de acuerdo en algo: es imposible.
Ese es otro temita: cuando todos estamos de acuerdo en algo no hay nadie que pueda mostrarnos otra posibilidad. ¿Nocierto? Todos estamos de acuerdo en que si ponemos el agua en el fuego al rato hierve. Habrá que tratar de no usar agua estancada o con cloro. Lo más probable es que hierva tarde o temprano. De eso estamos seguros; hierve.

Pero a Juan Seguro se lo llevaron preso. ¿Por qué? Porque un día apareció El Artista.

El que vino a mostrar otra posibilidad. Un Artista que además es Creador. Un Creador que además genera varios mundos. Y es ese tipo solo el que conoce el comportamiento de ese mundo. Ese mundo con personas y lugares, objetos y sensaciones que nadie más que el Artista o Creador conoce. Un mundo en el que el 6 viene después del 2001. O el 120 es tan importante como el 90. Un mundo en el que las prioridades son exclusivamente bizarras o de difícil entendimiento.

Pero ¿para qué se mete uno en mundos que no comprende?

Bueno, tampoco hay tantos artistas. Leyendo escritores, conociendo sus mundos, me doy cuenta de que muy pocos se animan a crear espacios nuevos para el pensamiento, sino más bien, crean situaciones que uno sabe cómo van a terminar. No sólo cómo terminan: uno adivina qué palabras van a ir seguidas y cuáles separadas. Leer se transforma en un acto de confirmación de una realidad que para muchos puede ser sorprendente. Leer en lugar de mirar por la ventana. Leer en lugar de escuchar la radio o ver la tele. ¿Ven? Ahí tienen: ¿cómo vas a escuchar la tele? ¿Se puede? ¡Hell, yeah! ¿Pero cuántos se copan en escribir ver la radio? No muchos, porque van a decir que estás hablando de varias cosas: estamos en una Estación de Radio desde donde transmiten el programa. Ponele que esa sea una explicación de las posibles para entender la frase ver la radio.

Pero... ¿dónde radica el miedo que provoca escribir ver la radio?
Obviamente, en que no todos van a entender una misma cosa de esa "ambigua" frase. No vamos a estar de acuerdo. Y eso, hoy en día, con la enorme influencia del concepto de "mercado" y "rating", que todos tengamos una visión o explicación posibles diferente, es inadmisible. Repito: inadmisible.

A medida que me llegan libros a la editorial entiendo cada vez más a muchas personas pero también noto que muchos escritores hacen más de lo mismo y esos textos vuelven mi tiempo, mi trabajo, mi forma de dialogar con el mundo, cada vez más infructuosa y previsible. Si escribís un texto para fotocopiar la realidad por qué no te comprás una cámara de fotos y comprás rollos a color. Te va a ir mejor. O una cámara. Claro, me vas a decir: muy caro. Y ahí otra cosita en la que estamos de acuerdo: el que más plata tiene, más cosas hace, más cosas puede, ¿no?

¡No!

Para desgracia de muchos y consuelo de tontos algunos escritores son más matemáticos que artistas. ¡Ahí está! ¡Si te gusta tanto la matemática, estudiá matemática! ¡Querés ser matemático! Poner el 1, poner el 2, después el 3, el 4... ¿no?

¡Exactas, queridx!
¡Exactas!

Cuando me fumo un porro, me clavo una birra o me siento a comer o chupar con mis amigos del Quinteto de la Muerte, huyo de la realidad. Me meto en un mundo distinto donde no hay cosas que no me gusten. A mis amigos los quiero, mis amigos me quieren, como, tomo, escucho, aprendo, aconsejo, me río, me río, me río. Tampoco es cuestión de escribir para huír de la realidad pero a cada santo con su monaguillo. Huír de la realidad no está mal. Poner la realidad en un papel tampoco está mal. No hay nada que esté mal o esté bien, ¿nocierto? Todo es posible, nothing impossible.

¡Nocierto!

Todo es posible, sí; siguiendo el camino que te lleva a que eso sea posible. Garchar en lugar de mirar una porno o mirar una porno en lugar de garchar te frustra. Vos querés una cosa y conseguís otra. ¿No te pasa? Dale... ¿no te pasa? ¿Que quisieras ver una porno en lugar de garchar o querés acariciar un cuerpo en lugar de la pantalla?
Los libros que me gusta leer, recibir en la editorial, estudiar para crecer como escritor, son los libros o textos o frases de artistas que descubren un camino alternativo para lograr un objetivo específico. Escritores que crean realidades, mundos, personajes de manera que cada cosa tenga un relieve tangible, que parezcan reales, que me provocan chispa en las neuronas. Esos son los que me gustan: los que juegan.

Por ejemplo, cuando lo veo tocar la guitarra Facundo Gorostiza, me da una sensación de felicidad y alegría enormes. A él no le importa si vos te estás divirtiendo; él se divierte de a tarros. ¿Probaste pararte a lado de alguien que se ríe a carcajadas? No tardás mucho en reírte vos también. Es contagioso. El talento de Facundo Gorostiza, su interpretación, también es contagiosa.
En cambio, cuando lo veo a Riquelme patear una pelota, me da ganas de aprender las reglas del tenis. Qué cara de culo, por Dios. ¿Tan feo es lo que estás haciendo? Antes lo miraba, siempre lo vi jugar, junto al Payasito Aimar... ¿alguno se acuerda cómo se reía dentro de la cancha? Pero ahora no; le falta alegría.
Y claro, si no lo disfruta.
Entonces, volviendo; ¿por qué no invitar a esos escritores que no disfrutan un carajo lo que hacen, que se la pasan oliendo mierda con la cara, a que se dediquen a disfrutar? ¿No querés sacar fotos? ¿No querés ponerte un kiosco? ¿Modelar? ¿Armar bombas? ¿Coger?

*

Me aburro muy seguido.
Eso es un hecho: la mayoría de las cosas que evito son del tipo "previsibles". No evito cosas difíciles. Al contrario, creo que las difíciles me gustan. Pero cuando me aburro, cambio. Los Mudos lleva 3 años. Y este es el cuarto. Y venía medio aburrido al final del año pasado. O no tanto pero a punto. Este año cambió. Y la vez pasada estuvo bien (un par creen que fue la mejor en la historia de Los Mudos) pero creo que esta noche, porque va a ir más gente, será mejor que la anterior. Y para esta noche tenemos planeadas un par de cosas complejas...

...pero puta
...qué bien la vamos a pasar.


*

miércoles, febrero 25, 2009

Pegar en la trompa del poder

Por Gerardo David Cristante

Un día de inspección municipal:
¿Inspectores municipales o astrólogos de la desgracia?

Libario Bar Multiespacio
Club de cultura 232
Julian Alvarez 1315, Palermo

Jueves, 1.30 de la madrugada. Ya he perdido la cuenta de las veces que vienen los inspectores a certificar una y otra vez las mismas cosas. Pareciera que es un acto que se borra, una película de film que se quema en el mismísimo instante en que los inspectores se van de Libario. Son siempre diferentes, pareciera que el plantel de inspectores de la ciudad de Buenos Aires es infinito. Pareciera que el impuesto de los contribuyentes se pierde en un absurdo indescifrable de inspectores que no se repiten, que van mutando como piezas de un ajedrez de fantasía. Parecieran personajes Beckettianos condenados a la repetición de los actos como manera de permanecer en este universo fatal de los boliches con música en vivo. Esa especie de clasificación infame que huele ha podrido y que infecta las reglas del buen vivir de la ciudad.
Es cierto, somos cáncer en las venas, somos sangre corrompida y contestataria que se pudre y que pudre el cuerpo de la ciudad. Somos miasma con hedor a podredumbre, sonido de estiércol que se pierde en la alcantarilla. 
Pero no nos vencerán.

Una y otra vez estos señores entran al local y piden las mismas cosas como si nunca hubiese sucedido. Inventan nuevos pedidos, se rascan la cabeza, sacan una linternita de Sherlock Holmes y la enfocan al piso buscando las miguitas perdidas de Hansel y Gretel. No se ponen de acuerdo con los matafuegos correspondientes, que son 5, que son 6, que son 4. De nada vale apegarse a lo estrictamente escrito en la ley. Les muestro, les comento el decreto de necesidad y urgencia llamado Club de Cultura, pero me dicen que eso ya venció. Les explico que no, que hubo una prórroga pero no están enterados; les explico que hay más de 300 locales con esa habilitación transitoria. Les digo que estoy tramitando la definitiva, pero el Gobierno tarda más de un año en realizar un impacto ambiental. 

No hay caso, hablan por teléfono a no sé quién, algo huele mal, acá tocan rock, acá es peligroso. Todas las veces debo soportar el mismo llamado telefónico a un Dios inexplicable que está del otro lado del teléfono y se supone vela por la seguridad de todos nosotros. 

Me piden el certificado de desinfección, se los doy; me piden el botiquín de emergencias, se los muestro; me piden el comprobante de pintura ignífuga, se los doy; pero no basta, buscan, hurgan como ratas de alcantarilla, cuentan una y otra vez los carteles de salida. Tengo cuatro pero me dicen que necesito más, la vez pasada tenía tres y puse uno más por las dudas, pero me dicen que tengo que poner otro más para que la semana que viene venga otro inspector y me diga que cuatro no son suficientes, debo ubicar otro más, por las dudas, y yo me pregunto ¿Qué pasa con la ley?
Si debo obedecer a cada inspector que de manera subjetiva y sin criterio lógico me ordena como si tuviera un poder de policía especial que debo poner aquí y allá los carteles para que a la semana siguiente otro inspector con otro criterio me diga que tantos carteles no son necesarios y que los matafuegos en la entrada no van, tienen que ir al lado de los equipos de sonido, etc., etc., etc., todo tan poco serio y fatal.
Los únicos peligrosos en esta noche son los inspectores que asustan por su ignorancia. Lo único peligroso esta noche es la plata perdida en miles de inspectores ordinarios que no se ponen de acuerdo porque ni siquiera en el Gobierno saben de lo que están hablando. Lo único peligroso esta noche es la prepotencia, la discriminación, la persecución que realizan estos señores por el local sin importarles los artistas ni el público que se reúne a presenciar un espectáculo. 
Interrumpen innecesariamente la escena para verificar cosas que se pueden realizar sin necesidad de tomar tanto protagonismo. Son actores malos, resentidos e incapaces de comportarse en una inspección, son las vedettes de la nueva era. Inspectores con portaligas y conchero.

Realmente me duele tanta ignorancia gratuita, tanto desconocimiento del género que inspeccionan, tanta falta de sensibilidad con el hecho artístico. Lo único peligroso esta noche son las dos horas y media que tuve que soportar repitiendo y mostrando los mismos papeles una y otra vez mientras la gente del bar se iba fastidiada otra vez por estos cónsules de la desgracia, que huelen tragedias donde no hay, que son cuervos y carroñeros, que les falta inteligencia para hacer una evaluación crítica y lúcida de la situación por la que estamos pasando. Inspectores que especulan con el futuro de lo que va a suceder como si fueran astrólogos de la desgracia. 

Tanto dinero desperdiciado en inspecciones absurdas, tanta falta de comunicación entre los distintos departamentos del Gobierno, tanta falta de educación y prepotencia hablan por si solas. Esta persecución innecesaria suena pueril, banal y superflua ante tanta desigualdad social y tanta falta de recursos para lo verdaderamente importante. Salud, educación, trabajo, etc., etc., etc., la lista de prioridades es infinita.

No digo que no se ocupen de los boliches con música en vivo, pero ocúpense bien y eficazmente. Y déjennos a nosotros las manifestaciones artísticas (que de eso saben poco) y no atenten contra el trabajo de los artistas. Hay poco trabajo y se nos va el alma en eso porque tenemos dedicación y pasión, honestidad y trabajo, algo de lo que a ustedes, señores inspectores, les falta mucho.



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martes, diciembre 23, 2008

Juan Manuel Daza

entrevistado por 
Natalia Molina

¿Cuáles son tus herramientas al escribir?

Mis herramientas no son muchas. Creo que hay una especie de confianza en el vértigo, difícil de explicar. Imaginate que estás andando en bici, vas muy muy rápido, y tenés que pasar entre un auto estacionado y otro que está frenando, en un espacio muy muy chiquito. Y además, corrés el riesgo de que alguien abra la puerta. ¿Viste la sensación de estar sorteando ese obstáculo, esa dificultad? Básicamente eso es lo que siento cuando escribo y algo me sale bien y me sorprende. Es lo que busco. Y esa, tambíen, creo que es la herramienta en la que más confío. Luego, te podría decir que la escritura periodística tiene mucho que ver en mi forma de escribir. Pero a su vez mi forma de escribir ficción o poesía, tiene mucho que ver con mi forma periodística. En ambas trato de buscar las formas breves, concisas y bien "palo y a la bolsa".


Juan Manuel Daza nació el 23 de enero de 1985 en el Hospital Italiano de Capital Federal. Vive en la ciudad de Ituzaingó (conurbano bonaerense). Integra el Staff de la Editorial Casi Incendio la Casa (CILC), publicó: "Poemas para leer bajo la frazada", "Santería" y "Vamos a rockearla!" (en coautoría con Juan Alberto Crasci).

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viernes, noviembre 28, 2008

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Este país es tan enquilombado que lo único que puede sacar en limpio es buena literatura.

El diariero de mi cuadra

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jueves, noviembre 13, 2008

En el Abasto vivo hace poco

vía Jara,
mi nuevo
dealer



Publicado en Bonk

Ahora pienso que en algún sentido hace unos años que nosotros venimos haciendo algo parecido a eso. Fabricamos miles de ficciones de la derrota mientras mandamos a nuestros peores Chuck Norris a escribir aventuras de una guerra que ya no existe.

Por eso tenés que volver de España, Chuck Norris. Dejá de ser turista: acá hay una guerra.


lunes, agosto 11, 2008

Sigue la encuesta a editores


¿Cuál es el libro que más te gustó editar? ¿Qué libro te hubiese gustado editar? ¿Qué libro hace falta editar? En cada uno de los casos, ¿por qué?

El libro que más me gustó editar fue, sin duda alguna, Penúltimo poema del fútbol, de Bernardo Canal Feijóo. Creo que hicimos justicia con el primer libro de la historia de la poesía argentina que se animó a tematizar el deporte: Canal lo hizo en 1924, en la provincia de Santiago del Estero. Hoy, ese gesto vanguardista parece increíble. Pero también es increíble que ese lenguaje poético no haya perdido actualidad, 84 años después de su primera edición en libro.
Hay muchos poetas olvidados de nuestro pasado literario nacional, que bien podrían iluminar y ayudarnos a encaminar la producción del presente: Jorge Enrique Ramponi, el poeta mendocino que influenció a Neruda, Juan Manuel Inchauspe, ese gran poeta de Santa Fe, tan importante como el cordobés Romilio Ribero. Pero también hay extraordinarios poetas vivos, que merecen ser sacados de su marginalidad. Algo hicimos en esa dirección al publicar al pampeano Juan Carlos Bustriazo Ortiz, pero hay muchos otros nombres: Jacobo Regen (Salta), María Elvira Juárez (Tucumán), y tantos y tantas que constituirían una lista interminable. La producción poética de todos ellos merece circular a nivel nacional, y llegar también a las nuevas generaciones. Tanto como las nuevas generaciones de poetas de provincias merecemos ser reconocidos como poetas argentinos, no sólo locales. Y en eso estamos.
[...]


Carlos J. Aldazábal
es editor de El Suri Porfiado


*

jueves, julio 24, 2008

¿Cuál es el rol del editor hoy en día?



El editor tiene que preservar al autor, aconsejarlo y hacer una lectura tan sólida como crítica. Su rol es el del resguardo previo al movimiento de la publicación, los ojos que ven los aciertos pero también las fallas, o las líneas que deberían (re)direccionarse para llegar a un lugar determinado. Vislumbrar en conjunto ese lugar y hacerlo posible, es lo mejor que puede pasar en ese pacto tan íntimo que crean los editores con cada autor. Al menos así lo vemos nosotros.
En el caso de editoriales pequeñas como la nuestra, el editor hace todo: busca autores, lee material, discute con el imprentero, interviene en el diseño, en la distribución, la prensa, etc. Trata de dejar una huella en la recepción del texto, porque el texto es sólo una parte de su trabajo. El editor edita libros, no textos. Y en términos más generales, a través del catálogo que conforma, es un tipo que agarra materiales culturales y los mezcla, los pone a trabajar en conjunto. El editor es cada vez más una figura colectiva, y la imagen pequeñoburguesa del pequeño empresario al estilo Herralde forma parte de lo residual.

jueves, junio 26, 2008

Los Sonics de Seattle son re unidos

*

-Che, Gary... ¿cómo la ves?
-Y... complicada, man... al enano ese hay que matarlo.
-No, no, boludo, no te hablo del partido, te hablo para después. Lo de Jara.
-Uy, cierto que es hoy...
-¡Qué? ¿Te olvidaste, boludo?
-No, no, es que le dije a Monique...
-¡Monique! ¿Te seguís viendo con esa arrastrada?
-No digas eso, ella está mal. Hay que acompañarla, se le murió la gatita y está muy deprimida... que en paz descanse.
-Gary, la reputísimamadrequetereparió, pelotudo. Me dijiste que íbamos a lo de Jaramillo, forro.
Decí que está lleno de gente y tengo 4 faltas que si no te rompo la boca, garca. El libro me lo dedica a mí, tendés. ¿Me vas a dejar solo? ¿Eh? ¡Puto! ¡Cagón! ¡Mal amigo!¿No te avisé con tiempo, como querías?
-Mirá, Shawn, hago lo que puedo, tengo 5 tipos enfrente que me quieren romper la boca antes que vos y tengo otros 50 mil tipos que me rompen el orto si estos 5 de enfrente me rompen la boca así que no me presiones, ¡okey!
-Relajate, man. Relajate.
-...es ese enano de mierda...
-¿Venís o no venís...?
-...que si lo agarro con...
Al enano dejamelo a mí!
-¿Eh?
-Si corto al enano, venís conmigo. ¿Tamo?
-Tamo.

- - - -
¿Y vos qué creés?
Just do it
-cuak-
- - - -
Moreno 2320
a las 21 hs
esta mismísima noche


*

miércoles, junio 25, 2008

Funes se enojó

76 de Félix Bruzzone
+ 1 dedo de la Sonia
Aclaremos los tantos.
Uno se enoja como cualquier ser humano pero no se enoja siempre. Siempre siempre pasan otras cosas; ponele, que el Gobierno se cague en lo que promete. Y antes de que me digan gorila porque critico al Gobierno aclaro que todos los Gobiernos se cagan en lo que dicen y muchos otros hacen exactamente lo contrario a lo que prometen.
(En todo caso sería gorila si critico al Peronismo que tanto odio y no a este gobierno que de peronista no tiene ni la Plaza del Amor Pago - ups qué buen chiste).
Hay que estar preparados pero uno no siempre está lo suficientemente preparado para aguantar las "sorpresitas" de los Gobiernos.
Sigamos con mi enojo.
Otra de las cosas que se aprenden con el tiempo es que los enojos pueden servir para algo. En este caso, por ejemplo, en este lugar donde hay muchos amigos lectores (amigos sin ser lectores y lectores sin ser amigos, también); uno se da cuenta y aprende que si en el asunto del post escribe funes se enojó, este post lo leen más personas que la chucha y, en cambio, si escribiera tengo novedades muy buenas no lo leería ni mi mamá.

Entonces, aclarado que no estoy enojado sino que quiero contarles las novedades, van las novedades.

Como pueden ver, y si hacen click en la imagen lo verán mejor, hay una foto de la tapa de un libro (además de un dedo con una uña pintada). El libro se llama 76 y lo escribió Félix Bruzzone. Félix integra la cúpula editorial de Editorial Tamarisco. Además es un muy buen escritor (y lo digo por los cuentos que he leído de él). La novedad genial que les quería contar es que si esta noche podés pasar por Armenia 1740, a partir de las 22hs, vas a poder comprar el libro por un precio más accesible de lo que saldrá en librerías. Esta es una oportunidad y las oportunidades no se desperdician así nomás.

No leí el libro, leí un par de cosas que colgaron en el click. Podría leerlo y decirles qué me parece pero, primero, a mí no me sale. Para esos están los chicos que estudian en Puán (algunos creen que van a aprender a escribir y se frustran y enojan - pero en serio - en cambio otros directamente pierden el tiempo y van a garchar - lo cual está muy bien -, los muy pocos hacen bien las reseñas... pero no se las publican).
Segundo: no tengo intenciones de "hacer públicas" mis declaraciones. No quiero operar con este libro. Tengo muchas ganas de que me guste y eso no lo comparto; estoy perdiendo el enorme nivel de exhibicionismo que tenía y eso se debe a que estoy más viejo y un poco cansado de la careteada que me mandaba.
Todavía soy un poco careta, gato. Pero bueh, le voy bajando un cambio.


Otra novedad es que mañana hacemos la presentación de Grunge de Alfredo Jaramillo. Ya está todo armado y programado para que sea una noche genial. Y hay un par de sorpresitas para el final que van a dar que hablar.
Te mandaría un mensajito de sexo pero no tengo crédito: Moreno 2320, 21 hs, puntualísimo.

La otra novedad es que está a la venta el libro de Don Ramón. Pero eso ya lo deben saber. Ya les voy a contar. Sino, fijense que Pedro les cuenta un poco más en (haciendo click).

Y la otra novedad es que los quiero mucho.

Sin más, los saludo...
aguantá...
aguantá...
...
Sí... eh... ahí voy.
Sí sí, ya ya.
Bueno, eso.
Besos


*

lunes, mayo 19, 2008

Una pila de vida

extracto del post de
Marcelo Pisarro

La transcripción no alcanza a dar cuenta de la expresión. Hay tal resentimiento, tal desprecio en el tono de voz, que uno no puede más que sentir rechazo. Estas son las personas y estas son las expresiones que alejan al potencial lector. “Potencial”, digo, porque el que no tiene ni para comer no paga diez mangos para entrar a la burbuja a ilusionarse. El que se espanta es el que no forma parte, el que quizás sí podría formar parte de mediar las condiciones necesarias, y que finalmente desiste de hacerlo. Feinmann está diciendo: si no es para vos, no es para vos. Y si tratás de que sea tuyo, empezando por el lugar que más te queda a mano, que más condiciones de legitimidad social genera en cuanto a discurso público, entonces sos un pelotudo.

(No sé por qué, pero la palabra favorita de este tipo parece ser “pelotudo”. Si usted votó a Mauricio Macri, es un pelotudo. Si no votó a los Kirchner, es un pelotudo. Si no reconoce su genio, es un pelotudo. Y si tiene un bloc (sic), definitivamente es un pelotudo).


jueves, mayo 15, 2008

Libritos pelotudos II

Ayer le decía, "Rafael, hay que aprovechar las oportunidades... uno se entrena para captar y aprovechar las oportunidades como para cualquier otra cosa para la que uno necesita entrenamiento." Un poco rebuscado pero ahí va.
Las oportunidades. ¿Qué tópico, no?
Una hermosura. Esa mina que está ahí... una hermosura. La mirás y no podés creer lo bien que el vestido rojo se le prende a la cintura. Tiene dos pliegues encima de la cadera, porque se acaba de levantar del sillón, que los desaparece con un sensual movimiento hacia abajo pellizcando la tela y se te desabrochan los zapatos de la furia en el cierre. A su paso a la jauría le empiezan a brillar los labios. Se acerca. Mirás alrededor y ves la mesa de canapés. Viene por un canapé. Su carterita, minúscula como la tanga negra que se trasluce en el vestido, se le cae cuando la quiere cerrar. Se le cae y hace un ruidito. El ruidito de que tocó tu zapatito, querubín.

1) La levantás y decís se te cayó gracias de nada.
2) La levantás y decís que sos un delincuente y que no hay manera de que le devuelvas la cartera... o sí, hay una manera. Y se la devolvés.
3) No la levantás. Vos no te agachás por nadie.


Tenés un segundo. Cuando la bandeja pasa frente a vos hay que accionar. Otros reaccionan. Para aprovechar las oportunidades tenés que activar algo en tu cerebro y, por más torpe que seas, tenés que modificar el mundo que te rodea para que te favorezca de alguna manera.
No hay tutía. No hay códigos. No hay ética. No hay reflexión. No hay nada que te detenga. Es una oportunidad. No hay más como esas. O no lo sabés. Podés averiguarlo, entonces esperás. Pero te arriesgás a que no tengas otra oportunidad. Si querés pensamos juntos las "contras" de accionar el mundo hacia vos.
Hagamos la lista.
Okey.
Ahora leela.
Okey.
Ahora te pregunto: ¿Y? ¿De qué te sirvió? Ah bueno... tenés razón; ahora sabés. Grosso. Sabés. No muchos "saben". Ahora... a accionar.
No pero no se puede accionar, hay que reaccionar. Porque otro "ya aprovechó". Hay que modificar su rumbo. Ya largaron y, primero los tenés que alcanzar y después desviar.


Y volvemos a empezar.
Mientras, la mina está sentada en el sillón, martini seco apoyado en la carterita y una especie de pajita muy chiquita (como su tanga, suponés de nuevo) revolviendo la aceitunita rellena. Todo muy cool.


Todo muy lejano.



*

lunes, mayo 12, 2008

Libritos pelotudos I

Pongamos que no sé nada. Pongamos que lo poco que aprendí, que me costó lo que dos tetas para un trava de Sánchez de Loria, no me sirve demasiado. Apenas si con el oficio de encuadernador puedo hacer algo. Pero ni ahí. Porque ese oficio es una mierda: se vende caro, para pocos y encima nadie lo valora. O sea, sí, pero convengamos que no porque el libro sale 20 points y te dicen "che, es como un poco caro, ¿no?" Y yo pienso: no, man, no es caro; es lo que sale sin cobrarte mi trabajo de encuadernador... porque encima trabajo gratis.
Pero bueno, decía que no sé nada.
Entonces, veo que escribo unas cosas que nadie entiende y después escribo otras que a nadie le interesan. ¿No les pasa? Pero no me quiero embarrar porque ya veo a los anónimos insatisfechos con el sukini metido en el orto gritando que no escribo bien que obvio que no se entiende que obvio si ni siquiera sos escritor y demás. En función de lo que quiero decir se las concedo. No soy escritor.
Pero sigamos. ¿No les pasa que se enteran que un gran autor, grosso, que escribe bien, que se la pisa (digamos) vende 200 ejemplares de su último libro del que hicieron 1000 copias? Medio que te indigna, así, indignación de señora gorda con la cacerola de teflón y cuchara al tono porque te parece un haaaarrrooorrrr que Valeria Nazi Mazza esté firmando libros ¿de su autoría? en el predio ferial de Monsanto & Co. cual si fuera Tom Wolfe explicando por qué los periodistas se niegan a usar Viagra por temor a que su prestigio se vea mancillado.

Te digo. No entiendo nada. Que se venda tan poco... Si viviera con mi familia y volviera a tener 17 años los mataría a todos para después ir preso y que me curtan todos los del pabellón chino y me conviertan en trava. Cuando me toque salir, por buena conducta o por mamarla como corresponde, me pondría a escribir un libro y ahí sí: ahí vendería.
Pero no tengo más 17 años y no vivo con mi familia. Vivo con dos amigas que son una masa.
¿Entonces? ¿Cómo vendo más libros? Tampoco soy Valeria Nazi.
¡Ya sé!
Salgo en los diarios. Pero salgo en los suplementos literarios porque si salgo en la sección policiales ya sabemos cómo termina mi cerradito asterisco. Voy a los diarios y les digo que soy un escritor que tiene un libro y que quiere vender su libro y que, por favor, si me hacen una nota estaría muy bien porque así la gente me conoce, le da curiosidad y compra el libro.
¿Es muy ingenuo, verdad?
No hablo de mí. Yo no escribo, acuérdense; para esta discusión no soy escritor. Ahora vengo a contar la vida de un amigo escritor, ponele. Un amigo que es escritor y que escribe bien y es re grosso pero no lo conoce nadie. Ni la mamá se hace cargo de él. Entonces me pregunto cómo hace para vender más. Porque escribió su libro re grosso y lo tiene ahí metido en el cajón. Son cinco manuscritos (a las impresiones de la compu le dicen manuscritos; un error, claramente) que vienen a ser los últimos que le quedan. Porque los otros diez ya los entregó a otros amigos escritores y a periodistas. Porque conoce dos periodistas que nunca lo leyeron y que tampoco lo han leído después de recibir "el manuscrito".
¿Entonces, cómo hace mi amigo para vender sus libros?


*

miércoles, noviembre 21, 2007

Des-Gastan-te

Ya todos saben que soy un poco resentido.
Para el que no lo sepa, acá va una prueba.
Porque dicen que defenderse es salud, ahí voy... aunque me cueste el trabajo.



Muchos conocen la revista Alternativa Periodística. Hace poco que sale gracias al enorme esfuerzo que hacen unos pibes/periodistas que se arremangan para pelearla día a día investigando y estudiando y trabajando todo a la vez; además de contar con el apoyo de un tipo bastante raro como Daniel Amoroso del PRO quien, diría, banca el proyecto (aunque no se muy bien este dato).
Entonces, Alt P...
aguante aguante
(por los pibes/periodistas)


Ahora les voy a contar del Centro Cultural Ricardo Rojas; un lugar en el que trabajo hace 10 años. Un lugar al que le conozco todas las mañas. Y las mañanas también.
El Purgatorio (como le digo desde el anonimato) tiene un odio encarnizado por las propuestas que no salgan del centro mismo. El Purgatorio odia que vengan diez lúmpenes rastas con olor a chivo y dejen sus fotocopias de "acrobacia para principiantes" o "aprendé malabares en la plaza" o "casting de actores" u "obra de teatro blablabla tal fecha tal día" o "revista Psicoguía" o "whatever".
Odio: así podría llamarlo sin temor a equivocarme.
Desde hace años que (no solo yo) trabajo para buscar un lugar en el que se pueda difundir algo más que las actividades del Rojas. Somos un par ahí adentro pero poquitos.
De a poco lo vamos logrando. De a poco y rompiendo las reglas, comiéndote suspensiones pedorras o el rechazo de chupamedias y ñoquis que no piensan ni dos segundos lo bueno que estaría buenos aires si se difunden otras actividades que no solo tengan que ver con las del Purgatorio.
Y no estoy diciendo que usen las paredes para empapelar con folletos de gente que está moviendo en otras instituciones o empiecen a rociar el Purgatorio con Chivex; no, no.
Tampoco estoy diciendo que se gaste plata del presupuesto (que es muchísima) para armar una cartelera especial ni un mueble especial ni nada de nada especial. Pero nada, eh.
Lo único que le peleo al Purgatorio, todos los días de mi puta vida laboral (hasta hace dos meses), es que dejen la mesa enclenque, chota y roída que lograron desempolvar los pibes del sector Mantenimiento; otros que se pelan el orto todos los días.
Que la dejen ahí, que no la guarden, que no la escondan, que no se la encanuten... o como les guste decirlo.


Va el cruce

En la última Alt P con la tapa Buenos Aires la reina del ¿qué? aparece en los agradecimientos de la revista, ¡en segundo lugar!, el Centro Cultural Ricardo Rojas.
A mí me gustaría decirles, con muchísimo amor fraternal y respeto por el trabajo a dos manos de estos pibes/periodistas; que me dio soberanamente en el quinto forro de mis bien infladas y estériles pelotas que figure ese nombre en sus agradecimientos.
Centro Cultural Ricardo Rojas gracias por ¿qué?
Que le agradezcan a los garcas que hace más de 7 años vienen trabando la difusión de "alternatividades", que le vengan a chupar bien los pelos sucios de los huevos con olor a roquefort a un Centro que se caga en ellos y que no reconozca no solo mi trabajo sino también el de gente a cargo de la Librería y Prensa que realmente tiene un poco de amor propio y está abierta a nuevas propuestas es... es... es...


Es un pifie.
Ya lo se. Es uno solo.
Y además me quejo porque van a escuchar y porque sé que todavía pueden no defraudar.

Pero así como los banco y, de keruza, expongo las revistas a la vista de todos los alumnos boludos (a quienes el mismo Purgatorio maltrata-otro día les digo por qué) que agradecen la revista y les permite conocer esta interesante propuesta que es Alternativa Periodística también me creo con el derecho de poner en mi blog esto: qué mal pero qué mal le pifiaron, loco.


No se zarparon para nada, tranca, pero romperse el orto, pelearse, quedar como un hijo de puta, un vago, un transa, un forro y un tarado porque expongo esa revist (u otras revistas) y folletos de otros locos lindos y que después digan
AGRADECIMIENTOS
Centro Cultural Ricardo Rojas
me da ganas de armar una pira y mandarlos a la mismísima y recalcada concha de su madre a todos en el Purgatorio y la revista Psicoguía y Alt P y todas las que vengan. En fila y uno por uno. No te pido mi nombre. Tampoco te pido que agradezcas pero ustedes podrían preguntar... bah... eso me duele más... porque preguntaron y aclaré que no me dejaban pero que me arriesgaba a que me hincharan las bolas en MI laburo por SU trabajo.
Bueno, qué se yo, de los errores se aprende también. Yo me equivoco bastante seguido.


¿Y por qué el post?



Porque cansa ayudar y porque no pido nada a cambio salvo un mínimo de respeto.



*
Insisto,
aguante aguante
Alt P
por los pibes/periodistas;
pero la pifiaron en esta, man
*

martes, noviembre 06, 2007

... a que me mandan a matar ...


-¿Y cómo la ves, Nena?
-Y... te digo la verdad; difícil.
-¿Te dieron algún informe?
-Sí, varios... me liquidan en todos, Tito.
-Bueno, bueno, tranquila que hablo con Aníbal. No te preocupes que siempre tiene un as en la manga...
-...y un muerto en el placard, Néstor. ¿Por qué no me das vos una mano y te dejás de joder?
-Decíme qué necesitás... porque por ahora... a mí me dijeron que vamos bien.
-Mirá, a vos siempre te dicen vamos bien vamos bien y mirá los tomates.
-Basta che...
-Es que yo te dije, Tito...
-Bueno, bueno... decíme qué querés y dejáte de joder, dale que estoy apurado.
-¿Adónde vas ahora?
-Por ahí... no te pongas en rompebolas, Nena.
-Bueno, mirá... estuve hablando con Lucho y parece...
-¿Lo seguís viendo al tipo ese?
-Es problema mío, Tito.
-¿No habíamos hablado ya?
-¿Me vas a escuchar o no?
-Vos hacé lo que quieras pero yo te expliqué una sola cosa... y sabés bien de qué hablo...
-¡Tito! No me faltes el respeto, ¡¿okey?!
-Okey, okey...
-Necesito que hagas desaparecer TODAS las boletas de la gorda...
-¡¿Eh?!
-Lo que escuchaste, Tito...
-Pero cómo desaparecer...
-Sí, desaparecer, desaparecer... mirá, yo estuve pensando que mejor que ni salgan de la imprenta... para no enquilombar las escuelas ni a los fiscales mejor mandar imprimir menos. Del Colegio no tiene que salir nada que lleve una cruz colgada del cuello, ¿se entiende? Mandá la SIDE. Pedíle al Héctor Patoruzú ese que desaparezcan las boletas.
-Mirá que se va a complicar.
-Hacéme caso, Tito.
-Dejáme verlo, no te puedo asegurar nada... estamos a dos meses todavía.
-¡Estamos en el horno, Néstor!
-Bueno, bueno, calmáte...
-Mirá... creo que es la única salida... otra cosa; no pagaste la tarjeta.
-Se la mandé a Ciganotto.
-Esa turra... está bien, yo me encargo.
-Bueno, Nena hermosa... yo me rajo. ¿Te veo en casa?
-No sé.
-No te calentés... esta noche te llevo un regalo, vas a ver.