sábado, marzo 14, 2009

La posta de Facebook

Por Soledad Barruti
vía Beckham


“Desde este momento le otorgas a Facebook una licencia irrevocable, perpetua, no-exclusiva, transferible, completamente paga, universal (con el derecho a sublicenciar) para usar, copiar, publicar, extender, guardar, retener, demostrar públicamente o exponer, transmitir, escanear, reformatear, modificar, editar, encuadrar, traducir, citar, adaptar, crear trabajos derivados y distribuir (por múltiples grados), cualquier contenido de usuario que tú postees...” bla, bla, bla. Aunque nadie lo haya leído antes, eso dicen y dijeron siempre sus cláusulas. Pero cuando no habían terminado de cortar la torta de sus cinco años, y como quien no quiere la cosa, en el blog de Facebook apareció un escueto comunicado que sería la mecha del escándalo. Los TdS habían sido ajustados. ¿Qué habían hecho? Nada más que extraer el siguiente párrafo: “Puedes remover tu Contenido de Usuario del Sitio en cualquier momento. Si decides remover tu Contenido de Usuario, la licencia otorgada anteriormente automáticamente expirará, aunque conozcas que la Compañía puede retener copias archivadas de tu Contenido de Usuario”. Y, también agregar esto: “Las siguientes secciones van a sobrevivir cualquier terminación de tu uso del Servicio de Facebook: Conducta prohibida, Contenido de usuario, Prácticas privadas, Créditos de regalo, Propiedad; Derechos de propiedad, Licencias, Posteos, Disputas de usuarios; Quejas, Indemnizaciones, Descargos generales, Limitaciones o Responsabilidades, Terminación o cambios al Servicio de Facebook, Arbitraje, Derecho de gobierno; Pago y jurisdicción y otros”. Y entonces todo estalló.


[ interesante y completa - ojo, es larguísima pero vale la pena ]


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