viernes, octubre 05, 2007

Bautismo de fuego

Hoy llego temprano a la librería. Dante me abre la puerta que casi siempre está cerrada con llave. Atrás del mostrador, al frente de su PC, está Olga, la encargada del local. La saludo. Hay algo en ella que no me gusta: para ser sincera me cae muy mal. Subo a la oficina-depósito para dejar mi mochila. Es ahí cuando me doy cuenta. Escucho un ruido al fondo de las estanterías pero como casi no hay luz no puedo ver de que se trata. Cuando empiezo a caminar veo su silueta: es un gato. Me doy cuenta primero porque a medida q me acerco empieza a maullar y después por el fuerte olor a pis. Prendo la luz y veo q es un siamés y está atado a una cadena. También hay una jaula, un tigrecito de peluche, y restos de alimento por el piso. Todo está muy sucio, pienso q es un asco y q no se puede tener a un animal en esas condiciones. Me deprimo. Empiezo a pensar que estoy en el lugar equivocado, que esta gente no está bien y muchas otras cosas que me hacen sentir peor.

día 2 de su perversa experiencia

1 comentario:

Anónimo dijo...

qué esitada stoy...graciassss, K.