viernes, abril 17, 2009

Eh, vo, Gato

adivine quién escribió

-¿Vos no serás yuta, no?
-Volá de acá, infradotado. El Ropi que te tomaste no te deja distinguir un perro de un gato.
-¿Y vos cómo sabés si tomé Ropi? Tengo razón. Sos yuta...
-No, nene. Solamente el Rohypnol te pone la cara de boludo que tenés.
-¡Epa!... ¿Sabés que si yo quiero puedo golpearte acá, y nadie te va a oir?
-Que yo sepa los flecos no pegan. ¿Entendés, fleco deshilachado?
A veces puedo ser mala. Altanera. Herir con las palabras es lo que mejor me sale. Igual que Rodrigo. Al cico disfrazado de muerte lo dejé desarmado. A lo mejor sólo quería quedarse al lado mío un rato. Qué poco amistosa. No le di tiempo ni a que djara de balancearse, lo espanté con dos frases. Ahora ya es tarde, se fue nomás, puteándome por lo bajo, la mirada llena de sombras, abrochándose su campera de jean y cruzándose de brazos, como si mi descortesía hubiese dado en el blanco. Como si lo hubiera ensartado con un chucho de frío inesperado. Pobre pibe, encima se notaba que no era de por acá.



Samanta Schewblin | Lucila Román | Leonardo Oyola


*

1 comentario:

Anónimo dijo...

samanta schweblin?