martes, marzo 23, 2010

El Banderillero

precio pancho y la coca


Es la historia del tipo al que le pagan por estar en un cruce vial del Roca allá por Temperley. Su única familia es una hija de 19 años que está rebuena que estudia abogacía y se la pasa quejándose de lo mucho que tiene que viajar para ir hasta la facultad (UBA, por supuesto).
El banderillero Víctor tiene unas historias tremendas sobre la cantidad de gente que muere atropellada por los trenes, los traumas de los motorman´s, la poca plata que le pagan pero que se contradice con la fuerza de su sindicato al momento de organizar paros o boicotear servicios. Ha incendiado más de un vagón y lo cuenta.
El libro sería una especie de gran entrevista. Le robamos un poco el estilo de la escritura a Larraquy (el otro día lo conocí, ¡qué personaje!) y al ladri Capa Audaz (ladrón que roba ladrón, etc).
Se puede presentar en todas las estaciones de tren del país. Sí, bueh, no hay muchas, es cierto. Por eso no te la cobro casi nada. Me tomo 6 meses en escribirla. Te cobro el pancho y la coca. Cedo los derechos de la traducción al alemán.


¿cómo la ves?


*

5 comentarios:

Che Pereyra dijo...

Ésta sí! Compro, Funes.
Pero te pago no con pancho y coca, sino con un completo y un pisco sauer, cómo las ves???

Abrazo, che.

C.E dijo...

Yo también compro esta, escribila!

Unknown dijo...

El pisco te lo acepto. Al completo no lo paso, che. Lo probé sobrio y borracho, de entrada y plato principal (cuando hay hambre no hay pan duro) y nada: no lo trago.

Dale, tengo dos compradores, me pongo. Denme seis meses, eh.

Che Pereyra dijo...

Bakán!!! Tirando pa'septiembre, cierto?

Sabés? A mí el completo me partió el marote, Funes. Me hizo recordar, cuando lo probé, a los panchos bajoneros en Constitución al volver de Cemento, sólo que ahora con tomatitos, chucrut y todas esas cosas ricas.
Pero bué, para los gustos se pintan colores, dicen.

Abrazo grande Funes.

Unknown dijo...

Linda frase esa última.