miércoles, mayo 12, 2010

Hay pecados y pescados

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Cuento: Pecados en el techo
Seudónimo: Orillas

[ fragmento ]

−¿Qué hay ahí arriba?− Pregunta Ema. El padre le contesta con las palabras de Alan “un aislante térmico”. Y ante las preguntas de la nena solo se le dice que es una especie de aire acondicionado. Le agarra firmes los hombros y le aclara, con un tono más imperativo que el que se usa para las explicaciones, que tiene terminantemente prohibido subir, que si se llega a caer de esa escalera se le abre la cabeza como un zapallo. Y que si tiene suerte y no se la rompe, que se prepare, porque se la rompe él con un cachetazo. “¿Está claro?” y lo único que para Emma está claro es que tiene que investigar con urgencia qué hay en el techo.

[ . . . ]

Los recuerdos de la infancia de otros siempre resultan familiares en algún punto. La carga del misterio del final, las claras imágenes, situaciones divertidas y el fresco de una relación entre dos niños que no tiene nada que envidiar a las relaciones entre adultos trae a la luz un relato exquisito. Traición, fantasías, angustia, misterio. Si fuera Jefe de Márketin de una gran editorial, volvería a poner esa faja con la leyenda:
SI LA LEYÓ,
NO CUENTE EL FINAL


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1 comentario:

Anónimo dijo...

pasarán los blogs, con texto, contextos, imágenes y fotos, pasarán pasarán, pero el blog de funes quedará!